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Las distintas autoridades que acudieron ayer a la inauguración de la planta móvil para el reciclaje de escombros coincidieron al destacar la gran coordinación que ha existido entre las tres administraciones implicadas en la puesta en marcha de este servicio ­Junta de Andalucía, Diputación y Ayuntamiento­ y el proceso que se ha seguido para su entrada en funcionamiento. La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, reconoció que la comunidad andaluza está “un poco atrasada” de momento en materia de tratamiento de escombros, mientras que el presidente de la Diputación Provincial, Rafael Román, incidió en contrarrestar las críticas vertidas en las últimas semanas por algunas voces que denunciaban la excesiva cercanía de la planta con el complejo arqueológico de Doña Blanca. Una de estas voces críticas ha sido la del ex-concejal portuense de Cultura y Medio Ambiente, Juan Gómez Fernández, que dejó el equipo de gobierno de Independientes Portuenses el pasado verano. Para Rafael Román “la planta de reciclaje y tratamiento es totalmente inocua y respetuosa con el entorno y además contribuirá a la regeneración paisajística de la zona”, algo en lo que también incidió el gerente de la empresa adjudicataria de la planta, Miguel Angel Rodríguez. Tanto Rafael Román como el alcalde portuense, Hernán Díaz, quisieron agradecer al ex-vicepresidente de la Diputación, Luis Silva, el esfuerzo realizado en la consecución de esta planta, en la que puso un gran empeño. Hernán Díaz incidió además en su discurso en que se trata de “una planta pionera en toda Andalucía que se pone a disposición de la Bahía de Cádiz y de la Sierra”, al tiempo que reiteró el compromiso municipal para facilitar la gestión de las nuevas instalaciones.